Teckel o perro salchicha, da igual: nos encantan estos perros. Elegantes, listos y muy, muy especiales, son compañeros de vida perfectos que llenan los hogares de cariño. Aunque es una raza hogareña y “adicta” a los humanos, también necesitan de un adiestramiento que ayude a lograr una convivencia ideal con su familia. Si tienes un perrete de esta raza, te gustan a rabiar o tienes interés en el mundo del dog training, quédate conmigo, ¡y veamos cómo adiestrar a un teckel!
Teckel, un cazador de raza que adora estar en el sofá
¡Ah! Se me olvidaba: estos canes no solo reciben el nombre de “perros salchicha” y de teckel, sino que a laraza también se la conoce como Dachshund. Pues eso, a lo que íbamos: estos perros son unos “todoterreno”, está claro. Son cazadores natos a los que les apasiona el ejercicio, pero no le hacen ascos a pasar horas en casita, calentitos y bien acompañados. Estas características los convierten en fantásticos amigos y compañeros, aunque los pobres también se han ganado bastante fama de gruñones.
¿Te ves capaz de convertir a un perro antisocial en el mejor de los compañeros? Entonces, seguro que alguna vez te has planteado trabajar como entrenador canino, como el famoso “encantador de perros” que hace años triunfaba en televisión (César Vidal, para quien no lo recuerde). Si es así, infórmate sobre la posibilidad de hacer un Curso de Adiestramiento Canino y Felino para contar con un título profesional, que te abrirá las puertas de este sector. Que, por cierto, está en auge y tiene mucha demanda… ¡Dale una vuelta!
Sigamos con lo nuestro. Para saber cómo adiestrar a un teckel, en primer lugar hay que conocer bien a estos animales. Por supuesto, cada peludo es un mundo en sí mismo y su carácter varía de forma radical de un ejemplar a otro. Son perros con una energía inagotable, pero también amantes de la tranquilidad. Tienen fama de testarudos, aunque en realidad no es así: son animales inteligentes que aprenden a toda velocidad. Y aunque adoran a sus familias, pueden ser bastante desconfiados con los extraños . Por tanto, su adiestramiento tiene que contemplar pautas de socialización, sí o si.
Cómo adiestrar a un teckel: las 5 órdenes básicas
En realidad, estas cinco órdenes podríamos aplicarlas a cualquier raza canina, ya que son esenciales para el comportamiento en sociedad de nuestras mascotas. Pero en el adiestramiento de nuestro perro salchicha tampoco pueden faltar. Cuando consigas que las aprenda y las interiorice, pasar a las siguientes fases del entrenamiento te será mucho más sencillo. Quédate con ellas:
Orden 1: dejar de ladrar
Desde luego, a nadie nos gusta que nuestro perro ladre sin parar, en casa o en la calle… No solo nos raya a nosotros, sino que los vecinos nos pueden montar un consejo de guerra. Pero, ojo: la idea no es que no ladre (es un comportamiento inherente a cualquier can, y necesario para su desarrollo), sino que deje de hacerlo cuando se lo ordenemos. Prueba esta técnica: utilizando una palabra corta y sonora (las inglesas shut o stop, por ejemplo) y en un horario en el que sepas que no vas a molestar a nadie, fuerza una situación que haga que tu perro ladre. Por ejemplo, pide a un amigo o amiga que pase por fuera de la puerta de tu casa. Ordénale que pare de forma firme y concisa, y prémiale cuando consigas que lo haga. ¡Mucha paciencia!
Orden 2: ir hacia ti
A la hora de plantearnos cómo adiestrar a un teckel, el comando “ven” es uno de los más importantes. Cuando consigas que lo obedezca, puede ser crucial para sacar a tu peludo de situaciones peligrosas para él, para otros perros o para los humanos. Lo mejor es pronunciar la palabra “ven” y el nombre del can a continuación, para que reconozca que te estás dirigiendo a él. De nuevo, recompénsale cuando te obedezca; alguna vez le puedes dar una golosina, pero no siempre. El refuerzo positivo, las palabras de cariño y las caricias también les encantan…
Orden 3: caminar a tu lado
Como cualquier otra orden, conviene entrenarla cuando el perro es aún cachorro. Si no ha cumplido aún los 4 meses, mejor. Es un aprendizaje fundamental para que no tiren de la correa (se pueden hacer daño y es muy molesto para ti) y para que no se pierdan si los dejamos sueltos en algún lugar. Ponle la correa a tu amigo y llévala muy corta, cerca de ti. Camina durante un rato, y si no tira, dale dos o tres chuches a lo largo del paseo para que entienda que lo está haciendo genial. Poco a poco irá entendiendo que es una recompensa, ¡y no volverá a tirar!
Orden 4: esperar
Podemos llamarlo “esperar” o “quedarse quieto”. En cualquier caso, lo que le estamos pidiendo a nuestro teckel es que no se abalance ante cualquier estímulo y espere a que nosotros le permitamos hacerlo. Un ejemplo habitual es el momento en el que le ponemos la comida: lo normal es que meta la cabeza en el plato, mientras una lluvia de pienso le cae sobre la cabeza. ¿Te suena? Para evitarlo hay que entrenar la orden “quieto”, “espera” o el inglés “wait”. En esta fase del adiestramiento las recompensas son fundamentales, ya que a estos perros les cuesta mucho no obedecer a sus instintos (como cazadores que son). El proceso es sencillo: dar la orden, esperar y recompensarle cuando la obedezca.
Orden 5: ¡suelta!
¿Tu teckel la ha emprendido con tu zapatilla y no hay manera de sacársela de la boca? Para evitar esta situación y otras más peligrosas (por ejemplo, que se coma cualquier cosa de la calle con riesgo de sufrir una intoxicación), es fundamental enseñarle esta orden. La idea es que abra la boca y suelte inmediatamente cualquier cosa que haya enganchado. Para ello, coge un juguete que le guste morder (o tu zapatilla mordisqueada) y dáselo. Dale la orden “suelta” y extiende la mano para que te lo dé. Cuando no lo haga, enséñale otro juguete o una golosina, y si lo suelta, dáselos. Repite el adiestramiento de forma regular y constante, si puede ser todos los días y a la misma hora. ¡Verás como termina por aprender!
Cómo adiestrar a un teckel… En modo pro
Estas cinco pautas básicas son el ABC del adiestramiento canino. Si eres constante y cariñoso, tu teckel aprenderá rápido y disfrutaréis mucho más en vuestros paseos o en casa. No hay nada como tener un can perfectamente educado que sepa convivir feliz con las personas y otras mascotas… Si te gusta el mundo del adiestramiento animal, y me da la sensación de que así es, ¿has pensado en hacerlo de forma profesional? Pues sigue leyendo.
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