“-¿Qué camino debo seguir para salir de aquí? -Eso depende en gran parte del sitio al que quieras llegar. -No me importa mucho el sitio. -Entonces tampoco importa mucho el camino que tomes”. Esta es una de las conversaciones que Alicia tiene con un misterioso gato tras perderse en el mundo de los sueños. Quién es ese gato y qué hace ahí son preguntas que todavía muchos siguen haciéndose. Por eso, hoy vengo a revelarte uno de los Grandes Enigmas de la Humanidad y la Veterinaria: cuál es el gato de Alicia en el País de las Maravillas.

Un gato “risón” más británico que la Reina Madre

Para saber de dónde viene este gato, tenemos que adentrarnos en lo más profundo del subconsciente de Alicia, el personaje que Lewis Carroll creó para su novela de 1865. Esta famosísima obra ha inspirado diversas películas, videojuegos y otras ficciones, y se ha convertido en uno de los mayores referentes a la hora de crear mundos oníricos. Entre sus personajes más célebres se encuentra un icónico gato parlante que sonríe mostrando sus dientes en la oscuridad, y que desaparece y aparece fundiéndose con la penumbra nocturna.

Aunque es difícil que te topes con el gato de Alicia en el País de las Maravillas, hay muchos otros que estarán encantados de conocerte. Si te animas a hacer un Curso de Auxiliar y Técnico Veterinario, podrás ayudar a muchos animales a estar tan contentos que poco les faltará sonreír como el extraño felino que Alicia encuentra. ¡Anímate y celébralo con una buena taza de té, como el Sombrerero Loco y la Liebre de Marzo!

¿Quién es, pues, ese gato tan particular? En inglés se refieren a él como Cheshire cat, que en castellano significa “gato de Cheshire”. También se ha traducido su nombre como gato risón, gato de los deseos o gato sonriente. Si quieres saber si este gato se inspira en uno real, si es invención de Lewis Carroll o si procede de algún otro lugar, ¡sigue leyendo!

Origen del gato de 'Alicia en el País de las Maravillas'

“Gato de Cheshire": Se ríe como un gato de Cheshire. Dícese de alguien que muestra sus dientes y encías cuando ríe”. Esta es la primera vez que tenemos registro de una mención documentada de este minino sonriente. Se trata de la versión corregida y completa de 1788 del Diccionario Clásico de la Lengua Vulgar de Francis Grose. Por tanto, el gato de Alicia en el País de las Maravillas no se inspira en ninguna raza de gato concreta, sino en una expresión popular.

Hay numerosas teorías sobre la procedencia del dicho. Sabemos que viene del condado de Cheshire, situado en la región noroeste de Inglaterra; un enclave donde hay gran cantidad de granjas lecheras. Según la versión más extendida, la expresión procede de lo felices que eran los gatos de Cheshire al tener tanta leche a su alrededor, además de por la cantidad de ratones que acudían al olor del queso. También hay quienes dicen que su origen reside en uno de esos quesos, que se moldeaba con una forma similar a la cara de un gato con una amplia sonrisa. Según otras personas, algunos pintores del área intentaban retratar leones rugiendo… Con tan poco éxito que parecían, en realidad, gatitos felices.

Lewis Carroll creció en el condado de Cheshire. Allí, su padre era vicario de la Iglesia de St. Wilfrid, en el pueblo de Grappenhall. Desde lo alto de la puerta principal de esa misma iglesia, un gato sonriente recibe a sus visitantes desde el siglo XII. Además, en sus memorias Carroll cuenta cómo en Birmstage, otro pueblo que se encontraba entonces en el condado, vio “un gato de Cheshire sonriendo esculpido en una pared”. 

El escritor se pasó la vida rodeado de estos felinos. Como él mismo dice en Alicia en el País de las Maravillas, cuando el gato desaparece y deja únicamente una sonrisa que se asemeja a la luna: “Había visto muchos gatos sin sonrisa, pero ninguna sonrisa sin gatos”. Tal vez el resto de habitantes de la región confundieran los brillantes dientes de estos gatos con la luna, y por eso nunca fueran capaz de verlos.

¿Cómo saber si un gato está contento?

Si tu gato sonríe mostrando unos dientes de anuncio de Happydent, PREOCÚPATE: la mayoría de felinos no sonríe como el gato de Alicia en el País de las Maravillas. Por eso, tal vez no siempre sea fácil detectar si están de buen humor. Aquí te ofrezco algunos indicios que demuestran que tu gato es feliz:

  • Come con entusiasmo: si un gato come de forma regular y no muestra reticencia, es un síntoma de que se encuentra en buen estado. Aun así, algunos comen menos dependiendo de la estación del año. De todas formas, tú ofrécele siempre comida de buena calidad y alguna chuche de vez en cuando. ¡Eso podrá ayudar a que se sienta mejor!
  • Ronronea: el ronroneo de los gatos, aunque en algún caso concreto puede ser debido a miedo o dolor, suele ser señal de que está a gusto. Si además de ronronear muestra una actitud relajada, no hay duda de que está encantado con lo que esté pasando.
  • Pide cariño: al igual que con los humanos, hay gatos menos cariñosos y hay que dejarles espacio. Eso no implica necesariamente que se encuentren mal, sino que cada uno tiene su carácter. Pero… ¿Y lo bonito que es cuando uno de esos gatos tan distantes decide que eres digno de acariciarle? Ya sea uno de esos o uno de los que se pasan el día pegados a ti, si requieren que les des mimos, alégrate. Ese gato está cómodo a tu lado.
  • Se revuelca por el suelo: cuando uno de estos bigotudos se deja caer, se pone a dar vueltas y muestra su tripa, está demostrando una confianza absoluta. Si es capaz de mostrarse así de vulnerable, siente que no hay nada que temer. Además, a los humanos nos encanta verles así… Todo el mundo gana.

Como ya he dicho, hay gatos que necesitan más espacio; esto no tiene por qué significar que están enfermos, tristes o ansiosos. Sin embargo, si sospechas que tu gato no se encuentra bien por algún motivo, llévale a una revisión veterinaria. Si no tiene ningún problema médico, la buena comida, los juguetes o el uso de catnip y feromonas pueden ayudarle a sentirse más cómodo en casa, y a relajarse. Aunque no hablen como el de Lewis Carroll, las personas que convivimos con gatos sabemos que en el fondo, son ellos los que están al mando. Tenemos que mantenerlos felices para que traigan felicidad al resto de la casa.

Encuentra tu propio País de las Maravillas… Animales

“No estoy loco, mi realidad es diferente a la tuya”. Esta es otra de las famosas frases del gato de Alicia en el País de las Maravillas. Tal vez se lo puedas decir a alguien si no te cree cuando le cuentes que te has encontrado a uno de estos felinos sonrientes. Y tal vez, como Alicia, puedas seguir a tu propio conejo blanco y adentrarte en una aventura fascinante. ¿Te pica la curiosidad?

Rellena el formulario que aparece en esta web; y cuando lo hagas, te mandaremos toda la información sobre un Curso de Auxiliar y Técnico Veterinario. Gatos, conejos blancos, liebres, erizos y muchos otros animales te estarán esperando. Podrás incluso realizar hasta 300 horas de prácticas con ellos. Aunque no desaparezcan mágicamente en mitad de la noche, no usen reloj, no te inviten a tomar el té o no puedas jugar al cróquet con ellos, seguro que tienen mucho que enseñarte. Y sin duda, tú podrás aportarles mucho también.

Nos encantan la literatura y el cine, pero hay también un mundo entero a tu alcance lleno de seres increíbles que puedes descubrir. Lánzate a conocerlos y… ¡Sonríe como un gato de Cheshire!