Mamba negra, la serpiente más letal

¿Eres un snake lover empedernido? Eso quiere decir, como mínimo, que sientes debilidad por los ofidios. Y no digamos, cuando hablamos de especies que destacan sobre el resto por derecho propio. Pues hoy te presento a la mamba negra, una belleza africana de mordedura letal… Pero no por ello menos interesante. Vas a flipar en cuanto descubras a la velocidad que es capaz de moverse, sus estrategias de caza o su personalidad reservada. ¿A que mola?

Mamba negra: la más venenosa de su continente

En el continente africano, la reputación de este reptil perteneciente a la familia de las Elapidae no puede ser peor. Y con toda la razón del mundo, porque la mamba negra (Dendroaspis polylepis) tiene el “honor” de ser la más venenosa del continente debido al elevado nivel de toxicidad de su veneno, la dendrotoxina. Esta serpiente campa a sus anchas por laderas rocosas, zonas boscosas y sabanas del África subsahariana, donde su fama es archiconocida…

De manera que, sí: esta reina en letalidad infunde miedo a cualquier ser humano con dos dedos de frente. Pero, aunque sea una de las serpientes más mortales del mundo, la número uno habita en Australia: hablamos de la taipán del interior. Estudiar a estos seres fascinantes, (con todas las precauciones, por supuesto) puede ser un sueño para cualquier amante de los animales. Si te animas a realizar un Curso de Técnico en Animales Exóticos de calidad, puede que en breve empiece tu vida junto a ellos… Y es que trabajar en el cuidado de criaturas como la mamba negra tiene que ser, en dos palabras, ¡im-presionante!

Larga como un “día sin pan”

Superado el dato de su peligrosidad, hay mucho más por descubrir sobre este reptil de belleza hipnótica. Para empezar, el dicho popular que da título a esta sección le hace justicia: algunos ejemplares de mamba negra pueden llegar a medir 4,6 metros. Aunque lo normal es que no superen los 2-2,5 metros, que ya es bastante, ¿no te parece?

Y ahora, vamos con su velocidad. Cierra los ojos e imagínala deslizándose por sus territorios favoritos. ¿Me crees si te digo que es capaz de hacerlo a 20 km por hora? Pues así es. Para alguien que no sufra de herpetofobia, que ya sabemos que es miedo a las serpientes, esta especie es un diamante en bruto en lo que a particularidades se refiere

Lo de su nombre también es curiosísimo. No tiene nada que ver con su color dominante: no hace falta encontrarnos con ella para saber que su coloración es clara cuando es joven y oscurece a medida que crece hacia tonos marrones y grises. ¿Y entonces? La cavidad bucal de este reptil es la razón, porque es de un negro azulado fácil de reconocer cuando la abre al sentirse amenazada. ¡Un espectáculo!

Una tímida sin remedio que campa a sus anchas por África

Siguiendo con las singularidades de la mamba negra, cuesta creer que una de las serpientes más venenosas de la tierra posea un carácter huidizo y algo tímido. Sin embargo, así se comporta en sus dominios territoriales, que se extienden por 23 países de la África Subsahariana. Es posible avistarla en las colinas, bosques y sabanas de Zambia, Angola, Sudáfrica y República Democrática del Congo, entre otros.

Según South African National Biodiversity Institute, el avistamiento de esta amiga de los climas templados y tropicales en el occidente de África es una realidad. Tanto es así, que podemos hablar de cuatro subespecies de mamba negra en función de su localización geográfica:

• Dendroaspis polylepis polylepis. La llamada mamba negra de África oriental.
• Dendroaspis polylepis occidentalis. Es la mamba negra originaria de África occidental.
• Dendroaspis polylepis subocularis. Una subespecie del África del sur.
• Dendroaspis polylepis somalica. La mamba negra autóctona de Somalia.

En su hábitat natural, lo más fácil es visualizarla desplazándose estratégicamente por tierra, aunque no hay que olvidar que es un ofidio arborícola. De hecho, en ocasiones se la puede sorprender silenciosamente abrazada a los árboles, donde al parecer prefiere descansar.

Y lo que también parece estar muy claro es que a esta criatura de hábitos diurnos le va la dieta carnívora, alimentándose de aves, murciélagos, roedores e incluso otras serpientes. Aunque sea una depredadora implacable, no es agresiva: más bien evita los enfrentamientos, tanto con su entorno natural como con el hombre. Por tanto, su leyenda negra no es en absoluto real: sí, su mordedura es letal, pero solo ataca cuando se siente amenazada o para alimentarse.

Emboscadas, parálisis y antídotos: mucho cuidado con ella

Para avistar a una mamba negra en plena caza, basta con observar sus territorios favoritos y esperar pacientemente a su aparición. En cambio, rara vez se la ve en regiones que superan los 1000 metros de altitud. Ahondando algo más, su estrategia por excelencia es tender una emboscada a sus víctimas desde su guarida, donde espera para atacarlas después de haberlas localizado con la vista.

El ataque en sí, similar al de sus temibles “primas” las cobras, consiste en levantar su cuerpo de la tierra y a continuación morder a sus presas para inyectar su veneno. Después se retira a esperar que haga efecto: lo habitual es que la presa muera por parálisis y que la mamba negra salga de nuevo de su escondite para comérsela. El tiempo medio que necesita para ingerirla es de unas ocho horas. Desde luego, la escena es digna de una película de terror y ciencia ficción…

Esta táctica de caza puede sufrir alguna que otra variación, cuando la víctima se resiste. En ese caso, las mordeduras de sus colmillos retráctiles se intensifican y repiten, con la intención de acabar cuanto antes con la vida de su víctima. Estos dientes están conectados a las glándulas venenosas, generadoras de esa neurotoxina letal de la que ya hemos hablado, la dendrotoxina. Una sustancia capaz de paralizar el sistema nervioso y provocar la muerte.

¿Quieres saber más sobre este veneno que la mamba negra inyecta en dosis de 100 miligramos por mordedura? O, casi mejor: ¿te gustaría conocer su antídoto? Según la revista Nature Communications, un grupo de científicos de la Universidad de Dinamarca ha logrado crear un cóctel de anticuerpos más efectivo que los antídotos anteriores para neutralizar el veneno de esta belleza, a la que desde luego es mejor admirar a distancia.

¿Te gustaría trabajar con criaturas tan increíbles como la mamba negra?

Si la respuesta es que sí, seguramente has nacido para volcarte en el bienestar de los seres más exóticos. Ahora que ya sabes que la mamba negra es un ofidio fascinante, es el momento de plantearse un futuro cuidando a estas serpientes y a muchas otras criaturas del reino animal.

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Y entre todos los “pacientes” exóticos que pasarán por tus manos, tal vez algún día puedas ayudar al cuidado y conservación de la mamba negra. Sin duda, una profesión hecha a la medida de un snake lover como tú.

Bibliografía:

• Milo, A. (2023, febrero 23). Mamba negra, la serpiente mortal que domina el África subsahariana. National Geographic en Español. https://www.ngenespanol.com/animales/mamba-negra-la-serpiente-mortal-que-domina-el-africa-subsahariana/
• Black mamba. (2020, octubre 6). SANBI – Biodiversity of Life. https://www.sanbi.org/animal-of-the-week/black-mamba/
• Arana, M. (2017, marzo 24). Serpiente mamba negra: tamaño, veneno y dónde vive – ¡Con FOTOS! expertoanimal.com. https://www.expertoanimal.com/mamba-negra-tamano-veneno-y-donde-vive-22719.html
• Efe, R. es /. (2018, octubre 3). Descubren un nuevo antídoto para el veneno de la mamba negra. RTVE.es. https://www.rtve.es/noticias/20181003/descubren-nuevo-antidoto-para-veneno-mamba-negra/1811502.shtml