El Código Deontológico Veterinario es un texto extenso y fundamentado, destinado a impulsar la práctica ética de esta maravillosa profesión. Se trata de un conjunto de principios y reglas que todo buen profesional del sector debe conocer, si no a fondo, sí en lo fundamental. Si estás pensando en trabajar en el mundo de la salud y el bienestar animal, te conviene saber lo que dice este código y cómo aplicarlo en tu trabajo en el futuro. ¡Sigue leyendo!

¿Qué es el Código Deontológico en veterinaria?

El Código Deontológico Veterinario no es, como podrás imaginar, el único que existe. Son muchísimas las profesiones que tienen el suyo propio, de acuerdo con el ejercicio de sus funciones. Según el Diccionario Panhispánico del Español Jurídico, un código deontológico es un “conjunto de preceptos que tipifican las infracciones y las sanciones relacionadas con el ejercicio de una determinada profesión”.

En nuestro caso, el texto que nos interesa recibe el nombre de Código Deontológico para el Ejercicio de la Profesión Veterinaria. Es un documento esencial para cualquier profesional de la salud animal, por lo que si has pensado en convertirte en Asistente y Auxiliar Técnico Veterinario, también afectará al desarrollo de tu labor. El código actual fue redactado y aprobado en la Asamblea General de Presidentes celebrada el 15 de diciembre de 2018, y sustituye al anterior de 2006.

El propio texto define claramente su esencia y sus funciones. En el segundo capítulo, el Artículo 1 explica en qué consiste la deontología veterinaria y el código en sí:

  1. La deontología profesional veterinaria es el conjunto de deberes y principios éticos propios de la profesión Veterinaria. En definitiva, es el conjunto de principios y reglas que conforman el contenido ético que debe inspirar y guiar la actuación de los profesionales veterinarios.
  2. El Código Deontológico de la profesión Veterinaria es el cuerpo normativo donde se recopilan esos principios y reglas, derechos y deberes, inherentes a la ética profesional veterinaria.

¿Qué obligaciones tiene un veterinario?

De nuevo, gracias al Código Deontológico Veterinario podemos saber exactamente qué es lo que estos profesionales (y los ATV también, ya que son la mano derecha de los “vetes”) deben y no deben hacer en el ejercicio de su trabajo. Es algo que queda perfectamente tipificado el Capítulo IV, Artículo 8, en el que se estipulan los Deberes Básicos. El primer punto los resume así:

  • La protección de la salud y del bienestar animal, así como la lucha contra el maltrato animal.
  • La conservación y mejora de los recursos ganaderos y promoción de la salud de los animales.
  • La promoción, protección y prevención de la salud pública.
  • La conservación y defensa del medio ambiente.
  • La tenencia y uso responsable de los medicamentos.
  • La contribución y promoción de la tenencia responsable de los animales.
  • Mantener la integridad de la documentación veterinaria.

Todo esto está muy bien, pero es bastante genérico. Pero no hay que preocuparse, porque este Artículo incluye 13 puntos más donde se habla de casos puntuales y bien definidos. Se establecen obligaciones tan interesantes como la de estabilizar la salud de los animales cuando su vida corra peligro, no utilizar los conocimientos para someter a los animales a prácticas crueles y/o degradantes (sea cual sea el fin que se persiga), mantenerse al día en cuanto a formación o contar con un seguro de responsabilidad civil (o similar) para el ejercicio de su profesión, entre otras.

¿Cuáles son los principios de la veterinaria?

El Código Deontológico Veterinario deja muy claras sus intenciones en el Artículo 1, del que hablábamos antes. Pero el texto es extenso: tiene un total de 18 capítulos y 3 disposiciones. Aunque es posible extraer unos principios generales sobre la profesión veterinaria del Artículo 8 (que acabados de mencionar), también podemos consultar qué es lo que nos dicen algunas asociaciones de prestigio ubicadas en otros países.

Es el caso de a American Veterinary Medical Association (AVMA), que tiene publicados sus Principios de Ética Veterinaria. Tras una introducción al documento, en la primera sección se indica que los principios fundamentales de dicha ética son tres:

  • Administración. Este principio habla sobre la responsabilidad de los médicos veterinarios a la hora de aliviar el sufrimiento, promover la buena salud y el mejor interés de los animales, siempre en relación al interés el medioambiente y el público en general.
  • Integridad. Según este principio, los veterinarios deben ser honestos y veraces a la hora de interactuar con sus clientes, sus pacientes y el resto de su comunidad. Parece obvio, ¿verdad? Pues por si acaso, ahí queda.
  • Respeto: Por último, es obligación de los profesionales tratar con respeto a los animales, sus compañeros humanos y todos los miembros de la comunidad, entre los que se encuentran también sus colegas y los trabajadores que colaboren con ellos.

Si quieres trabajar en el mundo de la veterinaria, ¡sigue leyendo!

No me voy a extender más en este análisis del Código Deontológico Veterinario y la ética que rige esta profesión. Si tienes interés por el resto del contenido (que, por cierto, no es demasiado largo y sí muy interesante), puedes acceder a él a través de la web del Consejo General de Colegios Vererinarios de España. Encontrarás información esencial sobre esta disciplina, las tareas que desarrollan los profesionales y los principios en los que se basa su ejercicio.

Seguro que, después de ver lo beneficiosa que es la labor de los profesionales y la ética por la que se rigen, todavía tienes más ganas de trabajar en este sector. ¿Quieres dar un primer paso que no te comprometerá a nada? Pues rellena y envía el formulario que aparece en esta web. A cambio, recibirás información detallada sobre un curso que te capacitará como Auxiliar y Asistente Técnico Veterinario. Obtendrás una titulación que te abrirá las puertas de clínicas, consultas, tiendas, centros de recuperación de especies… Y todo tipo de espacios relacionados con el sector.

Con hasta 300 horas de prácticas, bolsa de trabajo y la posibilidad de estudiar de forma presencial u online, puede ser el primer paso de una fantástica carrera laboral. Desde ejercer como el mejor o la mejor ATV, un perfil imprescindible que trabaja en contacto directo con los animales, hasta continuar después con tu formación y titularte como médico veterinario. ¡El límite te lo impones tú!