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Curiosidades del oso panda: ¡te las mostramos!

15 diciembre 2022
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Si hay un animal que levanta pasiones amorosas, ese es el oso panda. En China, su país de origen, está considerado un ser divino y mitológico. Y en el resto del mundo, su presencia en películas y series de animación ha convertido a estos preciosos animales en «parte de la familia». Hoy te invito a acompañarme a descubrir las curiosidades del oso panda más increíbles, esas que hacen de él un ser de lo más especial. ¿Te vienes?

 

Curiosidades del oso panda: un «abrigo» con el yin y el yan

Puede que no hayas caído hasta ahora (o tal vez sí). Pero, ¿te has fijado que el pelaje blanco y negro del oso panda se distribuye igual que en el símbolo del yin y el yan? En estos animales coexisten dos tonos de pelo, el blanco y el negro. La cabeza es blanca, con las orejas y la zona de alrededor de los ojos en color negro. Una combinación que nos habla de equilibrio y compensación de fuerzas, al igual que el famoso símbolo oriental.

Este equilibrio de energías ha hecho que este maravilloso úrsido sea un animal venerado por la cultura china. En ella se le relaciona con conceptos tan particulares como la fragilidad o el pensamiento lateral, así como con la eterna juventud. Increíble, ¿verdad? Si te apasionan los animales XXL y te ves a ti mismo cuidándolos y procurando su bienestar, no dudes en realizar un Curso de Especialista en Grandes Mamíferos Terrestres. Los parques de la naturaleza y los mejores zoológicos necesitan expertos que sepan trabajar con seres así de impresionantes…

Y siguiendo con los símbolos, ahí va otra curiosidad del oso panda que probablemente desconocías: desde los años 70, el gobierno chino ha regalado varias crías de oso panda a otros países para que vivan en sus zoológicos, como muestra de buenas intenciones. Es lo que desde entonces se conoce como «diplomacia del panda».

 

Carnívoro, sí, pero come plantas

Como cualquier oso que se precie, los pandas son carnívoros. Pero como todo el mundo sabe a estas alturas, su comida favorita es el bambú. Y ahí va otra curiosidad del oso panda: la dieta de estos animales consiste en un 99% en brotes de bambú. Vamos, ¡que son prácticamente vegetarianos! Las cantidades de esta planta que pueden comer son espectaculares, ingiriendo entre 12 y 38 kilos al día. Para ello, estos osos dedican entre 10 y 12 horas a coger el bambú con los dedos y comérselo. Eso es vida…

Como carnívoros (o más bien omnívoros que son), estos animales complementan a veces su dieta con otros «ingredientes»: insectos, pequeños animales que cazan… Tienen lo que se conoce como dieta oportunista, que significa que comen lo que van encontrando y les viene bien. Pero para ellos, donde esté su amado bambú que se quite todo lo demás. ¿Sabías que en cautividad comen cosas supercuriosas? No me extiendo más: en este artículo descubrirás qué come el oso panda aparte de bambú, perfectamente explicado.

 

Un «oso gato grande» que enamora a todo el mundo

Lo de oso-gato-grande no me lo he inventado yo. Porque otra de las curiosidades del oso panda es precisamente su nombre. En chino significa eso mismo: lo de oso está claro, lo de grande también… ¿Y lo de gato? Pues tiene que ver con su carácter. Estos animales son tranquilos y pacíficos, a diferencia de algunos de sus parientes, como el oso polar o el oso grizzly. Su carácter tierno y cariñoso lo hace parecer un peluche gigante, pero a pesar de ser así de majete no le gusta demasiado la compañía: tienden a ser solitarios.

Una característica muy particular de estos animales es que cuando nacen, tienen muy poco que ver con su aspecto adulto. Las crías son rosadas y más bien pelonas (¡increíble!), y además nacen ciegas. Con el paso del tiempo van apareciendo las características zonas blancas y negras del pelaje, y por supuesto sus ojos van despertando a la vida. Esta debilidad, tristemente, tiene consecuencias: en los años 60 solo el 30% de las crías de panda que nacían en cautividad llegaban a adultos. Hoy, afortunadamente, el porcentaje está ya en un 90%. ¡Bien por ellas!

Estos pequeños seres son, sin duda, de lo más peculiares. Entre las curiosidades más interesantes del oso panda está el pequeñísimo tamaño que tienen estos animales al nacer. ¡Una cría recién nacida solo pesa unos 100 gramos! Y por si fuera poco, mide unos 15 cm. Vamos, más o menos, como un ratón… Teniendo en cuenta que en su edad adulta alcanzan los 125 kilos de peso, es algo realmente impresionante. De hecho, la comunidad científica lleva mucho tiempo estudiando el por qué de esta diferencia de tamaño, y a día de hoy todavía no tienen una respuesta.

 

¿Quieres saber alguna curiosidad más del oso panda?

Pues sí, todavía nos quedan cosas en el tintero. Ya te digo que el panda es un oso, pero no un oso cualquiera. A diferencia de sus peludos congéneres, por ejemplo, esta especie no hiberna cuando llega el frío. Además, tienen unas patas delanteras de lo más peculiares: cuentan con seis dedos, de los cuales uno de ellos está situado un poco más atrás que el resto. Esto les permite usarlo a modo de pinza, como si de un pulgar se tratase, para escoger, cortar y comer las delicadas ramitas y hojas de bambú.

Volviendo a lo de «oso gato grande», lo de gato no es solo por el carácter afable y tranquilo de estos animales. En realidad, tiene mucho que ver con los ojos. Los de los osos panda son muy similares a los de los felinos: no tienen pupilas redondas, sino que son una especie de hendiduras verticales. Y por muy tranquilos y pachones que sean, también hemos de decir que son excelentes trepadores y que nadan fenomenal. ¡Ya desde los 7 meses empieza a subirse por las ramas…!

 

Si te gustan estos animales, ¿a qué esperas para trabajar con ellos?

Estas son solo algunas de las curiosidades del oso panda más conocidas. Pero cualquiera que pase los días con estos bellísimos animales te dirá que no pueden ser más interesantes. Pero desgraciadamente, no tienen asegurado su futuro: aunque los últimos esfuerzos que se han hecho en China por evitar la extinción de la especie han sido un éxito (actualmente ya hay más de 1800 ejemplares en libertad), el cambio climático supone un riesgo para los bosques de bambú, el hábitat natural de los pandas.

Por esta razón, hoy más que nunca hacen falta profesionales que sepan cuidar y conservar a esta magnífica especie. Y por supuesto, a muchas otras que están en peligro por causa de la acción del ser humano en la naturaleza. Realizar un Curso de Especialista en Grandes Mamíferos Terrestres puede ser la puerta de entrada a un mundo laboral que nunca te habías imaginado: un mundo en el que tu día a día consistirá en compartir tu cariño y tus conocimientos con los animales más increíbles.

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