La mucosa gástrica es la encargada de proteger el estómago de nuestros compañeros felinos de los ácidos gástricos fundamentales para la digestión. Cuando se inflama se vuelve peligroso y doloroso para el animal, a este problema se le denomina gastritis en gatos y es necesario darle solución.
A lo largo de este artículo analizaremos las diferentes causas que generan este inconveniente, sus síntomas y los posibles tratamientos que puedes ofrecerle a tu gato. Todo ello puedes aprenderlo en nuestro Curso de Auxiliar Técnico Veterinario. Además, te daremos los mejores consejos para su cuidado. ¡Vamos allá!
Comprendiendo la gastritis en gatos: causas y síntomas
Como hemos comentado esta enfermedad consiste en la inflamación de la mucosa gástrica. En determinados casos deriva en problemas más graves como úlceras que resultan muy peligrosas para el animal.
Existen múltiples causas que pueden provocar su aparición, ingerir algún alimento inadecuado como plantas tóxicas, heces de otros animales o sustancias tóxicas, es el motivo más común en el desarrollo de la gastritis, pero existen otros.
Componentes químicos del pienso o de los medicamentos, tragarse objetos inadecuados, las bolas de pelo o intolerancias alimentarias son otros ejemplos.
Por supuesto, la presencia de gastritis puede ser un síntoma de otra patología como infecciones o problemas de carácter renal o hepático. Será el profesional veterinario el que pueda responder a la duda sobre la causa de la gastritis.
Detectarla a tiempo es fundamental para evitar males mayores. Esto implica estar atento a una serie de síntomas y actuar en consecuencias una vez identificados. Estos son algunos de los más relevantes:
- Falta de apetito en el animal que deriva en no comer y en una pérdida de peso.
- Devuelve la comida o el agua nada más ingerirla.
- Vómitos frecuentes en los que se aprecia bilis amarillenta y salivación excesiva.
- La presencia de sangre en heces y las diarreas constantes son otro de los síntomas.
- Reacciones negativas cuando le palpas la parte superior del abdomen que se producen a consecuencia del dolor.
- Come plantas o hierbas siempre que puede.
- Duerme más horas de las habituales.
Diagnóstico de la gastritis en gatos
Ante cualquiera de los síntomas mencionados anteriormente es importante que tomes medidas. La primera de ellas es acudir a un profesional veterinario para que realice una prueba diagnóstica que permita confirmar las sospechas.
Una de las más habituales es la gastroscopia, este tubo consta de una cámara que permite al profesional observar la pared estomacal. Si se identifica rojez, inflamación y úlceras serán signos visuales y evidentes de este problema.
Por supuesto, una ecografía es perfecta para medir el grosor de la pared estomacal y observar la presencia de objetos extraños. Para completar el diagnóstico se realiza una analítica para medir los marcadores inflamatorios en sangre.
En aquellos casos en los que el profesional sospeche que la causa es un parásito o una bacteria será necesario tomar una muestra de heces para su análisis.
Opciones de tratamiento para la gastritis felina
Para poder ofrecer el mejor tratamiento ante esta patología es imprescindible conocer la causa que la provoca. El tratamiento base consiste en antiinflamatorios, protectores estomacales y analgésicos para reducir la inflamación y aliviar el dolor del gato.
En aquellos casos que un cuerpo extraño sea el responsable será necesaria una intervención quirúrgica para su retirada. Para el resto se recurre a antibióticos, antiparásitos o un cambio en la alimentación con el objetivo de eliminar al químico o patógeno causante de la gastritis.
Consejos para el cuidado de un gato con gastritis
Durante el desarrollo de la enfermedad es importante cuidar de manera adecuada al animal. Conseguir que el gato con gastritis esté cómodo le aportará una mayor sensación de bienestar. Siguiendo estos consejos lograrás que tu compañero felino pase esos días complicados de la mejor manera posible:
- Asegúrate de que el agua este siempre fresca.
- Intenta que ingiera tés realizados con componentes naturales con propiedades antiinflamatorias como el jengibre.
- Dale la medicación pautada en los horarios marcados por el veterinario para que su recuperación sea rápida.
- Aumenta el número de tomas de comida y reduce la cantidad en cada una para facilitar la digestión.
Alimentación adecuada para gatos con gastritis
Si tu animal ha sido diagnosticado con gastritis, es importante cuidar su alimentación. Como ya hemos comentado aumenta el número de tomas y reduce la cantidad en cada una, además, apuesta por una dieta blanda siguiendo las indicaciones de tu profesional de confianza.
El arroz debería convertirse en la base de la alimentación de tu gato. Gracias a él, se absorbe el agua durante la digestión reduciendo la diarrea. Acompáñalo de verduras como la calabaza y carnes como el pollo, entre ambos le darás proteínas y vitaminas que le ayudarán a mantener la energía.
Si no puedes prepararle una dieta a medida recurre a las latas de comida húmeda. Elige opciones basadas en pescado como las sardinas o el salmón. Compleméntalas con otros alimentos como el yogur para incorporar probióticos a su flora intestinal.
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Bibliografía
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