Te apasiona la veterinaria y quieres dedicarte a ella, pero no terminas de encontrar tu lugar en el sector. Ni te ves como docente, ni trabajando en una clínica o volcado en proyectos de reservas naturales… Porque puede que lo tuyo sea la investigación. Si es el caso, hay una profesión súper interesante, igual de vocacional y necesaria. ¿Te imaginas trabajando como parasitólogo veterinario? Vamos a descubrir en qué consiste, cómo especializarte en un campo tan enriquecedor y las oportunidades laborales que te abrirá. Si tienes alma de investigador, ¡no lo dudes!
Un parasitólogo veterinario no nace: se hace
Parasitología, inmunología, microbiología… Todas son ramas científicas pertenecientes a la investigación veterinaria. Un campo fundamental para velar por la salud animal y humana, y en definitiva, por el bienestar del planeta. Entre ellas, el de parasitólogo veterinario es uno de los perfiles profesionales más valorados que te puedes encontrar en las plantillas de un laboratorio.
En realidad, esta especialidad médica comienza a estudiarse en la carrera de Veterinaria. Puede que estés a punto de finalizar, cuentes ya con esta titulación superior en tu currículum o hayas completado una licenciatura muy similar. Y después, ¿por dónde tirar? Para profundizar en tus conocimientos y aprender las técnicas y metodologías que se aplican en los laboratorios, puedes plantearte realizar un Máster en Laboratorio Veterinario. Aprenderás los fundamentos de la parasitología y cómo aplicarla en el día a día, entre otros muchos temas. ¡Dale una vuelta!
De todos modos, si no tienes la titulación superior existen otras vías para formarse en esta rama de la veterinaria. ¡No es el fin del mundo! En concreto, realizar algún ciclo superior de FP. Existe un ciclo en particular, Ganadería y Asistencia en Sanidad Animal, que encaja a la perfección con tu objetivo. Una vez superado podrías estudiar un grado superior relacionado con este campo; y cuando lo termines, te estará esperando este máster.
Así es el día a día de un parasitólogo veterinario
Seguro que te interesa saber qué hacen exactamente estos profesionales. La rama, como su propio nombre indica, estudia a los parásitos: esos organismos que viven en (o sobre) otros organismos. Que, además, son los causantes de múltiples enfermedades y bajas en la población animal y vegetal.
Gran parte del trabajo de un parasitólogo veterinario se centra en investigar a estos organismos y descubrir cómo afectan a los animales, tanto domésticos como silvestres. Y en relación a ellos, al ser humano y a las plantas. Solo así es posible combatirlos para frenar o disminuir su impacto. Y por supuesto, estos profesionales también trabajan en la prevención y el control de las infestaciones. Para ello, deben tener conocimientos sólidos sobre los ciclos biológicos de los parásitos, que pueden ser microscópicos (los piojos, sin ir más lejos) o macroscópicos (los acantocéfalos, por ejemplo).
Qué debe incluir un programa de formación de calidad
Los expertos en parasitología veterinaria aplican las técnicas más avanzadas de estudio sobre los parásitos. Para especializarte, lo ideal es escoger un máster con un amplio capítulo sobre fundamentos de la parasitología y los principales parásitos que afectan a los animales Desde los protozoos hasta los platelmintos, pasando por los nematodos, los anélidos y los artrópodos.
El objetivo de estos expertos es realizar investigaciones epidemiológicas en zonas con alto nivel de parasitosis. Para ello, deben tener también conocimientos sobre otras ramas científicas íntimamente vinculadas a ella. Hablamos de hematología, inmunología, microbiología, bioquímica, toxicología… La mejor manera de adquirir los conocimientos específicos fundamentales en todas ellas es apostar por un máster cuyo temario las abarque todas.
No dejes de leer los programas de cabo a rabo para asegurarte de que vas a escoger la formación más completa. Cuando te lances al mercado laboral, puede ser el punto que marque la diferencia.
En busca del trabajo perfecto. ¿Por dónde empiezo?
Por mucha titulación que tengas, la experiencia es siempre fundamental para encontrar tu primer trabajo. Durante tus estudios universitarios, lo más seguro es que hayas realizado prácticas profesionales; si haces buenos contactos, puedes volver a contactar con tus antiguos “jefes” para comentarles que te has especializado como parasitólogo veterinario.
A veces, las empresas donde tienen lugar las prácticas brindan a estos alumnos su primer contrato de trabajo si ha quedado alguna vacante en sus equipos, están ampliando plantillas… o han visto algo especial en ti. Una oportunidad de oro para abrirte paso justo donde quieres estar, pues suelen ser laboratorios que tarde o temprano se terminarán cruzando en tu carrera laboral, como Agrovet, Anicura y Unavets.
Algunos másteres, además, ofrecen prácticas durante los dos años que dura la formación. Pero no todos las incluyen… ¡Y tampoco tiene por qué ser un problema! Además de la experiencia que hayas obtenido anteriormente, puedes empezar a “bichear” mientras estudias y compaginar el máster con un trabajo a tiempo parcial. En este sentido, escoger un curso a distancia con formación telepresencial puede ser la mejor elección, ya que no estarás condicionado por un horario estricto.
¿Algún otro consejo? Elige un centro formativo que te abone el terreno en la búsqueda de empleo y ofrezca algún valor añadido diferenciador para tu aprendizaje:
- Servicio de orientación laboral
- Observatorio de empleo propio para recibir ofertas actualizadas del sector
- Acuerdos de colaboración con las principales agencias de trabajo temporal del país
- Masterclasses de calidad para seguir creciendo en conocimientos
En busca del primer trabajo… sin tirar la toalla
La parasitología veterinaria es una especialidad en plena expansión, con un fuerte crecimiento laboral dentro del sector. La búsqueda de tu primer empleo no tiene por qué ser frustrante si trazas un plan que cubra muchos frentes:
- Hazte un CV chulo, personal y que entre por los ojos. Hay herramientas de diseño que te lo ponen muy fácil, como las plantillas de Canva o las presentaciones de PowerPoint. Todo menos una hoja de Word, que solo dará de ti una imagen “viejuna”
- Presenta un Portfolio digital además del CV, para mostrar los trabajos y proyectos en los que has participado. Es la herramienta perfecta para diferenciarte y destacar.
- Valora hacer una presentación visual divertida, pero a la vez, profesional. ¡Te marcarás un tanto!
- Apúntate a los principales portales online de empleo especializados en salud animal.
- Mira asiduamente las bolsas de trabajo de los colegios veterinarios y de organismos como el Consejo General de Colegios de Veterinarios de España.
- ¡Que tus redes sociales echen humo!
- Y si ya tienes una entrevista… Empápate de tutoriales y ensaya lo que haga falta.
El mejor máster para especializarte como parasitólogo veterinario
Si trabajar como parasitólogo veterinario te cuadra para tu futuro laboral, no perdamos más tiempo. Anímate y rellena el formulario que ves en esta web y descubrirás un Máster en Laboratorio Veterinario online de primer nivel: en muy poco tiempo, recibirás toda la información que necesitas para ver si su programa es lo que estabas buscando.
Un curso con una metodología eficiente e innovadora, que trabaja el aprendizaje a la carta. Y que incluye las herramientas básicas para afianzar los conocimientos teóricos del alumno: videoformaciones, test de evaluación, tutorías personalizadas… Con masterclasses impartidas por expertos de referencia, y un servicio de búsqueda de empleo activo que te ayudará a dar tus primeros pasos como parasitólogo veterinario. ¿Imaginas ya tu día a día en el laboratorio, trabajando en lo que más te gusta? Pues deja de soñar, ¡y a por todas!