¿Cuáles son los animales mamíferos voladores?

¿Siempre has sentido curiosidad por esas criaturas que vuelan o planean como si fueran aves pero sin serlo? Hablo de los mamíferos voladores, una familia de animales para echar de comer aparte con bastantes curiosidades en su ADN. Si quieres saber cómo se han adaptado al medio en el que viven y cuáles son los miembros más representativos, prepárate. ¡Te los presentamos para que te familiarices con ellos!

Mamíferos voladores. Raros, raros, raros

Mamíferos voladores. ¿Cuántas especies pueden agruparse dentro de esta familia tan particular? Aunque suene un tanto contradictorio, igual que existen mamíferos terrestres y marinos, nuestro planeta también está habitado por ellos. Es decir, clasificados por el medio natural en el que viven. Aunque encabezan la lista los murciélagos que sobrevuelan las ciudades al caer el sol, no son los únicos de la clasificación.

Descubrir que existen mamíferos voladores corrobora que la fauna animal no deja de sorprendernos. Lo mismo puede decirse de las personas con clara vocación por el cuidado de los animales. Por si eres uno de ellos, ¿has pensado hacer un Curso de Asistente y Auxiliar Técnico Veterinario? Podría ser el inicio de una carrera con grandes satisfacciones y proyectos alucinantes.

Volviendo al universo de los mamíferos voladores, aunque son una minoría, representan algo más de un 20% dentro del total de mamíferos conocidos en la Tierra, que alcanzan entre 4.500 y 5000 especies. Son muchos los datos que llaman la atención sobre ellos. Como descubrir que algunos emplean su propio sistema de navegación para localizar a sus víctimas y sortear obstáculos.

En concreto se llama ecolocalización y consiste en la emisión de ondas sonoras y en la interpretación de su eco al rebotar sobre materiales y animales cercanos a estos mamíferos. El murciélago es todo un maestro.

Volar lo que se dice volar… solo los murciélagos cuentan como mamíferos voladores

Antes de conocer a los miembros de este grupo tan rarito, seguro que te apetece descubrir qué tienen en común los mamíferos voladores. Si se llaman así es porque poseen la cualidad de desplazarse por el aire o planear, que no es exactamente lo mismo que poder volar como lo hacen las aves. Para ello su anatomía ha ido transformándose hasta contar con extremidades adaptadas. Fin del misterio.

Salvo estos rasgos, el resto de características fisiológicas son idénticas a las de cualquier otro mamífero del planeta. Y con eso quiero decir que están cubiertos de pelaje y que regulan su temperatura corporal como sus parientes. Sin embargo, al describir el tipo de vuelo que son capaces de realizar es cuando encontramos diferencias importantes.

Que quede claro, los mamíferos voladores que realmente vuelan batiendo sus alas a imagen y semejanza de las aves son los murciélagos (de la orden Chiroptera). Su estrategia de vuelo es activa y esta evidencia significa que son capaces de impulsarse para volar gracias al mecanismo de adaptación que han desarrollado. Una verdadera ingeniería de la naturaleza, pues han logrado reducir su peso corporal rebajando la densidad de sus huesos.

Mientras que el resto de “colegas” voladores tan solo planean en el aire en una dirección concreta, además de controlar sus saltos y evitar caídas. Todo gracias a la membrana generada entre sus extremidades posteriores y anteriores, que antes fue una fina piel. Científicamente esta estrategia se denomina vuelo pasivo.

Un elenco de mamíferos voladores para echar de comer aparte

Ha llegado el momento de presentártelas. Al menos a las especies más representativas con algunos datos curiosos. Por ejemplo, ¿nunca has llegado a entender por qué los murciélagos duermen boca abajo? Pues aquí va la explicación científica: sus patas traseras son tan frágiles que no aguantan su peso en posición erguida.

Para que vayas familiarizándote con este grupo tan sui géneris de mamíferos voladores:

Ardilla voladora: la del Norte y la del Sur

Esta amiga nocturna de cola aplanada, pelo marrón grisáceo y vientre blanco (Glaucomys sabrinus) habita entre Alaska y el norte de Canadá. Le encantan los bosques de coníferas y su dieta no solo se basa en frutos secos, puede ingerir insectos y pájaros pequeños. Muy parecida a ella pero con el pelo más claro, es la ardilla voladora del Sur (Glaucomys volans) que se localiza desde el sur de Canadá hasta Texas. Por cierto, su alimentación es bastante similar a la de su prima.

Lémur volador de Filipinas

Otra criatura fascinante (Cynocephalus volans) que habita en zonas boscosas de Malasia. De color gris jaspeado, llama la atención su cola, casi como el cuerpo de larga. No supera los 2 kilos de peso y sobrevive a base de flores, hojas y frutos secos. Una especie declarada vulnerable por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.

Nóctulo mediano

Te presento al murciélago de tamaño grande (Nyctalus noctula); puede pesar 40 gramos. De pelo pardo con toques rojizos, es curioso comprobar lo pequeñas que son sus orejas comparadas con el resto del cuerpo. Aunque vuela zonas boscosas que se encuentran en Europa, Asia y el norte de África, también es una especie migratoria que anida en las ciudades. De hecho, no es extraño verle volar junto a vencejos y golondrinas, pues sale a volar antes de que anochezca.

Petauro del azúcar

Atención a esta especie de mamífero volador (Petaurus breviceps). Aunque se ha convertido en una mascota bastante popular por su simpático aspecto y buen carácter, debe vivir en su hábitat natural para evitar que se extinga su población. Este habitante nocturno de ojos inmensos y rasgos similares a las ardillas, prefiere las zonas boscosas abiertas del este y el norte del país y su destreza como planeador entre los árboles es para nota. Alcanza distancias de hasta 45 metros.

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