¿Qué enfermedad cardíaca es más frecuente en perros pequeños?

Nuestros adorados perros también pueden sufrir problemas de corazón, como los humanos. ¿Te lo habías planteado? En datos, la enfermedad cardíaca en perros significa que 1 de cada 10 canes padece alguna patología cardiovascular. Una cifra para estar alerta si sospechas que tu mascota puede ser uno de ellos. Seguro que estás deseando conocer cuál es la más común y si afecta por igual a todas las razas… Pues ya te adelanto que, detectada a tiempo, puede ser tratada para mejorar la calidad de vida de estos peludos molones. ¡Buenas noticias!

Enfermedad cardíaca en perros: ¿por qué se da?

Pensar que nuestro compañero puede dejar de repente de ser el que era a consecuencia de una insuficiencia cardíaca, es para partir el corazón a cualquiera. Pero lo cierto es que el mal funcionamiento de este órgano, sin entrar a indagar el origen, puede tener graves consecuencias para su salud y bienestar. O incluso llegar a causar la muerte… Y es que, como sucede con los seres humanos, el aumento de esperanza de vida de estos ha traído consigo la aparición de ciertas patologías cardiovasculares. Increíble, pero cierto.

Son dolencias frecuentes en ejemplares de edades avanzadas, como proceso natural de su envejecimiento y desgaste del organismo. Y esto explica que hasta el 60% de canes ancianos padecen una enfermedad cardíaca en perros. ¡Hasta en esto se parecen a nosotros! Por eso es vital contar con profesionales expertos en la salud y el bienestar de estas mascotas: los reyes de la casa (junto con nuestros también adorados mininos). ¿He dado en la diana? No dejes de plantearte hacer un Curso de Asistente y Auxiliar Técnico Veterinario. Te cambiará la vida.

Aparte de que cada vez disfrutamos más de nuestros perretes en esta etapa de su vida, otro factor que influye a la hora de tener o no una enfermedad cardíaca es la genética del animal: algunas cardiopatías son hereditarias. Ahora bien, por asombroso que parezca, la exclusividad de padecer una insuficiencia de este tipo no es solo de los canes entrados en años…

Y es que algunas se presentan al nacer, y se detectan antes del año de vida del animal. Eso sí, son casos bastante más raros, y de ahí que solo representen el 10% de las cardiopatías que se ven en un centro veterinario. Mientras que las llamadas patologías adquiridas son las más numerosas, y su frecuencia aumenta con la edad de nuestros amigos.

Cómo detectar una (posible) insuficiencia en el corazón de tu amigo

Hablar de una enfermedad cardíaca en perros es hablar de distintos trastornos, que tarde o temprano se manifiestan en los canes. La prevención propiamente dicha es muy difícil. La consecuencia más evidente es una insuficiencia que mermará su calidad de vida. Agrandes rasgos, el corazón será incapaz de bombear suficiente sangre y cubrir las necesidades de sus tejidos y órganos.

Dicho así, la verdad es que suena duro. Pero nuestras mascotas nos agradecerán toda la vida habernos dado cuenta lo antes posible de que algo iba mal en su organismo. En casa, haciendo vida con ellos, algunas de las siguientes señales son motivo suficiente para sospechar:

• Tos nocturna o después del ejercicio.
• Imposibilidad de pasear. Si observas que se fatiga con facilidad en sus paseos diarios o en el momento de jugar con él.
• Desmayos o síncopes.
• Pérdida de peso.
• Encías de color anómalo. Desde rosa pálido hasta azules o moradas.
• Abdomen distendido. Debido a la presencia de líquido libre.

Lo siguiente será acudir a un veterinario de toda confianza, y si está especializado en cardiología, mejor que mejor. Para lograr un diagnóstico veraz, el experto iniciará una serie de pruebas que determinarán el tipo de patología y su gravedad. Tras un análisis exhaustivo del animal, una analítica completa podrá darle una valiosa información sobre la función renal y si la presencia de enzimas cardíacas es alta.

Otras pruebas frecuentes son las radiografías torácicas, de gran ayuda para identificar cambios en el tamaño del corazón; los electrocardiogramas (ECG), que pueden registrar arritmias y otras irregularidades en el ritmo cardíaco; y las ecocardiografías, capaces de evaluar cómo bombea el corazón (entre otros aspectos) mediante una imagen en tiempo real creada por ondas sonoras.

Por último, si el médico lo considera necesario, podrá recurrir a la colocación de un holter cardíaco en la mascota para registrar la actividad eléctrica del corazón durante 24 horas (esto también es igualito que la prueba de los humanos), o realizarle un cateterismo. ¡Todo sea por su bienestar!

Y la enfermedad cardíaca más frecuente en perros pequeños es…

Cada animal es único, y por tanto, cada peludo es un mundo. Sin embargo, cuando se habla de enfermedades cardíacas en perros es preciso diferenciar por razas y tamaño. Dicho de otro modo, no todos los canes padecen las mismas patologías. En concreto, los más pequeños parecen estar predispuestos a dolencias degenerativas, mientras que en los perretes grandotes se dan más casos de cardiomiopatías dilatadas. Increíble, ¿no?

Y sigo. De entre todas, la Enfermedad de la Válvula Mitral (EVM) es una de las más extendidas. Sobre todo, en razas que no superan los 20 kilos de peso. La lista es larga: ejemplares de caniche, teckel, bichón, pomerania, yorkshire terrier, schnauzer mini, cavalier king charles o Jack Russell, entre otras. Son especialmente propensas a padecerla y suele manifestarse cuando tienen entre 5 y 8 años.

En esta dolencia la válvula mitral se deteriora y engruesa, impidiendo que el corazón trabaje correctamente. El órgano tendrá que hacer un mayor esfuerzo, con el consiguiente deterioro que supone. En las fases iniciales de esta enfermedad los síntomas son muy leves, pero cuando ya está avanzada en el animal, la sintomatología es muy clara: fatiga, arritmias e incluso muerte súbita.

Aunque aún no es posible lograr una prevención eficaz de esta patología (ni de la mayoría), detectada a tiempo se puede tratar y lograr que nuestros amigos conserven una gran calidad de vida, prolongando además la esperanza. La detección precoz es clave y se logra con chequeos regulares y revisiones cardíacas, a partir de los cinco años. Afortunadamente, en los últimos años se ha evolucionado mucho y es posible detectar la enfermedad antes de que haya síntomas.

Si has nacido para cuidar de ellos, ¡hazte experto!

Si los animales, y no digamos las mascotas, dan sentido a tu vida es porque todo lo relacionado con ellos te hace feliz y a la vez te preocupa su salud. Incluida la enfermedad cardíaca en perros. Es decir: reúnes las cualidades que debe tener un cuidador con vocación y podrías ser un Asistente y Auxiliar Técnico Veterinario vocacional.

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