Mono capuchino: características de este primate

El mundo de los primates es apasionante para muchas personas. ¿Eres uno de ellos? Cada especie posee numerosas particularidades y el mono capuchino figura en esta familia del reino animal que enamora y desde luego no pasa inadvertido. Desde su nombre tan curioso a su capacidad para usar herramientas hechas con piedras o su historial cinematográfico, son rasgos por los que se diferencia de sus colegas. Y muchos más aspectos que hemos recopilado en este artículo. ¡Descúbrelos y verás qué pasada de especie!

Mono capuchino. ¿Y de dónde le viene el nombre?

Todos nos hemos preguntado más de una vez por qué ciertas especies son bautizadas con simpáticas nomenclaturas sin saber a qué aluden. En el caso del mono capuchino, al parecer la inspiración le vino dada a exploradores familiarizados con el mamífero porque su aspecto físico recordaba al hábito de los Frailes Menores Capuchinos. Despejada la incógnita, lo que está claro es que dedicarse al cuidado de animales tan fascinantes no es cualquier trabajo. Si haces un Curso de Técnico en Animales Exóticos podrás dejar de soñar y ser un profesional cualificado para velar por el bienestar de infinidad de especies enmarcadas en esta categoría. ¡Piénsatelo!

Solo con observar el corto pelaje de un mono capuchino se puede afirmar que la alusión funciona. Este puede ser de color negro, marrón oscuro, ante o beis claro y la forma en que se extiende sobre la piel del animal bien puede recordarnos a los tonos del hábito de la citada orden religiosa. Sobre todo el mono capuchino cariblanco, una de las especies más conocidas. Su inconfundible pelaje en blanco y negro sobre la cabeza no deja dudas.

Desde luego, tienes ante ti un primate realmente singular, que casi siempre luce mechones oscuros en la frente. De pequeño tamaño, no suele superar los 45 cm de largo, y dotado de una cola prensil de idéntica longitud que usa como quinta extremidad, este primate pertenece al Nuevo Mundo.

Eso quiere decir que su hábitat natural queda restringido al continente americano. Concretamente el mono capuchino se extiende por Centroamérica y América del Sur, habitando en países como Honduras, Perú, Brasil, Colombia, Argentina y Venezuela. Y por supuesto la selva amazónica.

El más inteligente del Nuevo Mundo y con su propia Edad de Piedra

El mono capuchino está considerado como la especie de primate de tamaño mediano más inteligente, tan solo superado por sus amigos los simios. Ante una afirmación de tal calibre, lo lógico es preguntarnos qué justifica semejante aseveración; ¿por qué lo son? Al parecer, el uso de piedras y rocas a modo de herramientas para crear lascas cuando se alimentan es una práctica que dominan y que incluso enseñan a sus crías.

Un comportamiento modélico entre el reino animal y que por otra parte llevan realizando hace miles de años, según estudios arqueológicos. En una palabra, estos primates son capaces de crear utensilios de afilados bordes con muchas semejanzas a las de nuestros primeros antepasados, los homínidos de la Edad de Piedra. Aunque el fin de dicha práctica en estado salvaje no sea el mismo, pues los monos capuchinos no parece que persigan afilar o cortar con tales útiles.

Décadas de investigación han servido para demostrar que el uso de herramientas no es una actividad exclusivamente humana. Y en el caso concreto de los monos capuchinos que habitan en el Parque Nacional de la Sierra de la Capibara, en Brasil, estudios científicos recientes han dejado claro que semejante comportamiento para ellos es una tradición que se remonta a la friolera de 3000 años.

El hallazgo de este yacimiento arqueológico no humano es de gran valor, pues está considerado como el más antiguo documentado fuera de África. A día de hoy, el monje capuchino que habita en estos impresionantes parajes continúa empleando piedras de cuarcita redondeadas para abrir la dura cáscara de sus frutos secos preferidos, los anacardos.

Nuestros amigos los golpean contra yunques de piedra mediante golpes percusivos y es bastante probable que el tamaño de tales herramientas haya ido adaptándose al de sus alimentos a lo largo de todos estos años. Este vídeo es una prueba increíble.

Qué comen, cómo se clasifican y su pasado cinéfilo

Sociable, amigo de vivir en manadas que pueden reunir a 40 individuos y arborícola por naturaleza. Así es este simpático mamífero con un legado cinematográfico. Su reconocimiento artístico le llegó cuando la American Human Association creó los premios Pawscars en 2011 para valorar el esfuerzo y actuación de los animales que participaban en películas. El mono capuchino más famoso del celuloide, Crystal, lograba así su gloria; una auténtica estrella con más de 25 películas en su currículum. Entre ellas títulos como Una noche en el museo y Doctor Doolittle. ¿A que entran ganas de verlas?

Después de este paréntesis cinéfilo, retomo datos curiosos sobre la alimentación de este adorable amigo que vive la mayor parte del tiempo subido en las copas de los árboles de selvas tropicales. La dieta favorita incluye frutos, hojas tiernas, semillas, huevos de aves, insectos y otros animales de pequeño tamaño, como los pájaros. Digno de mencionar es el uso que hacen de las cebollas. Al parecer se reúnen en grupos para realizar auténticos baños frotándose entre ellos con dicho tubérculo y así repeler a los mosquitos y otros insectos.

Para conocer a este primate más a fondo también es preciso saber que pertenece a la familia de los Cébidos (su nombre científico) con un total de 17 especies distribuidas en tres géneros. ¿Quieres apuntar?:

• Mono capuchino robusto. Endémico de las regiones cálidas de América del Sur, como podrás suponer es el más corpulento. Hay contabilizadas ocho especies.
• Mono capuchino grácil. Se caracteriza por la “capucha blanca” de pelo que enmarca su rostro y el género comprende cuatro especies. El capuchino llorón, el mono carablanca, el capuchino de frente blanca y el mono cairara.
• Mono capuchino ardilla. Habitan en bosques de Centroamérica y América del Sur, por ejemplo en Panamá, Costa Rica y la Amazonía. Cinco son las especies que se incluyen en este género.

Un maestro del bienestar de tus exóticos amigos

Ya lo decía al principio de este artículo. Trabajar cuidando a una familia tan alucinante como la de los animales exóticos es una profesión muy especial. Y desde luego altamente indicada para personas con auténtica vocación por todo tipo de mamíferos exóticos, aves, reptiles y anfibios. Es una realidad que el mundo de la veterinaria cada vez demanda más este perfil profesional para sus equipos en campos especializados en constante crecimiento.

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Mediante una avanzada metodología de aprendizaje sus objetivos son prepararte para ser un técnico muy versátil. Desde conocer técnicas de exploración y manejo clínico, a las principales patologías y los principios básicos de la medicina preventiva. Sin dejar a un lado conocimientos clave como las técnicas de mantenimiento en cautividad.

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