¿Cuándo se considera que un perro es geriátrico?

Envejecer a la vez que lo hace nuestra mascota canina, esa que nos ha regalado tantos momentos de felicidad, puede ser una experiencia vital fantástica para ambos. Un perro geriátrico es simplemente un animal viejito: se encuentra en la recta final, pero no está enfermo. Tan solo necesita a su lado alguien que le dedique todos los cuidados del mundo, vele por su salud y disfrute de su compañía. Esta etapa también puede deparar sorpresas gratificantes para tu amigo: ¡no todo son achaques! Descúbrelo por ti mismo y te enamorarás de ellos.

¡Un perro geriátrico en casa! ¿Por dónde empezar?

¿Nuestra mascota está ya en ese momento de su vida o aún es pronto? Es una duda lógica y fácil de despejar. El momento en el que a un perro se le considera geriátrico es bastante variable, pero en líneas generales el mundo de la veterinaria considera que hablamos de canes de edad avanzada cuando tienen entre 7 y 10 años. Sea cual sea la edad de tu mascota, da igual. Lo realmente importante es que, aunque ahora no sea tan mayor, casi seguro llegará a esta etapa (la mayoría lo logra) gracias al incremento en la esperanza de vida de estos animales.

La geriatría no es un término exclusivo del ser humano: es una realidad que nuestros peludos cada vez viven más años. Esto se debe a una mejoría considerable en la atención veterinaria, en su nutrición y en sus cuidados higiénicos. Qué importante (y fascinante) es estudiar materias como estas, claves para el bienestar animal… ¿Opinas igual? Plantéate hacer un Curso de Asistente y Auxiliar Técnico Veterinario. Le darás a tu vida un giro de ciento ochenta grados.

¿Dónde estábamos? Ah, sí, conociendo al perro geriátrico y descubriendo los primeros indicios de que nuestro compañero es un “viejuno” de manual. Los principales signos de envejecimiento van desde una disminución notable en su agudeza visual, el oído y el olfato, a trastornos en el descanso por cambios hormonales. Y no solo eso: también experimentan fatiga, alteraciones en su comportamiento y reducción de actividad física.

Volviendo a la geriatría animal, esta rama de la veterinaria estudia los trastornos que aparecen en los seres de avanza edad. Pues bien, en el caso concreto de los perros geriátricos, las alteraciones o enfermedades más frecuentes son la obesidad, la insuficiencia renal, los trastornos gastrointestinales, el cáncer y las enfermedades cardíacas. Cómo nos suenan, ¿verdad?

Cómo enfrentarse a su vejez sin tirar la toalla

Por si no queda claro, un perro geriátrico no está enfermo. Sería injusto empezar a mirar a nuestra mascota con otros ojos. Su edad y sus patologías son inevitables, pero claro que es posible adaptarnos a este momento vital cambiando rutinas, vigilando al máximo su salud e intentando combatir sus achaques… Que sea un viejuno no quiere decir que haya que tirar la toalla, aún puede disfrutar de muchas cosas en su día a día.

Un error frecuente es asociar los problemas de comportamiento de estos canes a su edad, sin plantearnos que es posible tratarlos. Pero no tiene por qué ser así. Este problema suele ir ligado a estados demenciales, también llamados disfunciones cognitivas; cuando el diagnóstico está claro, es posible aplicar tratamientos médicos que retrasen su deterioro. Consisten en terapias farmacológicas y terapias de modificación de conducta. Y a nivel preventivo, la estimulación mental y el ejercicio pueden ser de ayuda para los perros geriátricos.

Otra gran equivocación es renunciar al juego solo porque se encuentren más cansados. En un perro, el juego es un valioso indicativo para saber si está pletórico y feliz. Da igual que sea junior, senior o geriátrico: solo es cuestión de modificar su intensidad y duración.

El proceso de envejecimiento: ¡pura ley de vida!

Más cosas sobre la salud de estos amigos. Cómo experimentan un cambio irreversible en su organismo, su nutrición, ejercicio y genética pueden influir en el desarrollo de dichos cambios. Hablando de genética, al parecer las razas puras viven menos que las mestizas (algunas llegan a los 18 años) y los perros pequeños suelen ser más longevos que los de tamaño grande.

A nivel nutricional, hay que ser conscientes de que necesitan menos calorías en su dieta porque su metabolismo se ralentiza. Es clave controlar su peso. La actividad también suma: lograr que hagan ejercicio con regularidad ayuda a combatir la obesidad, un factor de riesgo asociado a patologías como la diabetes.

Por otra parte, el papel del veterinario en esta etapa es crucial; a través de revisiones anuales, podrá detectar las primeras fases de patologías propias de su envejecimiento. Se dan en sus pulmones, corazón, hígado, riñones, etc., y la mayoría de las veces pueden ser tratadas.

Un perro geriátrico también va al fisio… Y necesita otros estímulos

Gracias a la rehabilitación geriátrica canina, un perro viejuno puede mejorar su movilidad funcional. Y con ello, ganar calidad de vida hasta el fin de sus días. No dudes en poner freno a un estilo de vida sedentario, que es su gran enemigo. Y ten en cuenta que la fisioterapia veterinaria y los nuevos métodos de rehabilitación con enfoques holísticos son una valiosa herramienta.

Hasta ahora, esta especialidad se asociaba a la recuperación de mascotas accidentadas y con traumatismos (tanto perros como mininos). Pero ya se está empleando en mascotas con obesidad y en perros ancianos para reducir el dolor y las inflamaciones locales generados por patologías propias de su edad, detener la atrofia muscular que suelen padecer, etc. Qué bueno, ¿verdad?

Cuando llegue a esta etapa de su vida, son muchos los gestos y rutinas que podrás introducir para mejorar el bienestar de tu perro. Aparte de ir al fisio, adecuar su dieta (en ingredientes, en la forma de tomarla y en la frecuencia) y dar paseos propios para abueletes de su edad, quédate con estos:

• Refuerza la higiene. Y también la de sus utensilios, son más propensos a infecciones.
• Déjale descansar en solitario. Aunque se vuelva muy dependiente, le vendrá bien.
• Potencia su olfato. Y así estimularás sus neuronas: ejercitarlo agilizará su mente.
• Acaríciale y juega con él a diario. Se sentirá uno más de la familia.

¿Lo tuyo es el cuidado de las mascotas? ¡Sigue leyendo!

Si eres un enamorado sin remedio de los animales y las mascotas son tu debilidad, seguro que te importa muchísimo su salud y bienestar. Por supuesto, me refiero al cuidado de perros (geriátricos o no) y de otros adorables seres que necesitan atenciones sanitarias por parte de profesionales con cualificación. ¿Voy bien? Pues hay un perfil laboral que se ajusta a esta descripción: el de Asistente y Auxiliar Técnico Veterinario.

La profesión de ATV es una de las más demandadas en el sector de la veterinaria. Para ejercerla, es preciso contar con una formación de calidad como la de este curso y una vocación a toda prueba. En el curso aprenderás todos los conocimientos teóricos esenciales para asumir sus cuidados y enfrentarte a sus principales patologías, en una interacción muy enriquecedora.

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Bibliografía:

• Problemas de comportamiento en perros seniles | PortalVeterinaria. (s. f.). https://www.portalveterinaria.com/animales-de-compania/articulos/22555/problemas-de-comportamiento-en-perros-seniles.html
• Cuidados de los perros geriátricos – Animalnatura. (s. f.). https://animalnatura.com/blog/cuidados-de-los-perros-geriatricos-b29.html
• La fisioterapia como alternativa para lesiones en perros y gatos | PortalVeterinaria. (s. f.). https://www.portalveterinaria.com/animales-de-compania/articulos/35907/la-fisioterapia-como-alternativa-para-lesiones-en-perros-y-gatos.html