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Rehabilitación para gatos: ¿cuándo es necesaria?

17 agosto 2022
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La rehabilitación para gatos es una práctica profesional enfocada a hacer que los felinos vuelvan a sentirse bien tras una fractura, lesión o inflamación. Los profesionales que la practican les aplican técnicas analgésicas, promueven su recuperación de la movilidad, fuerza y, finalmente, participan activamente para que vuelvan a la vida normal. ¿Quién se lo merece más que ellos?

¿Quieres formar parte de los equipos que hacen que los gatos vuelvan a brincar como antes? ¡Fórmate para lograrlo! Con el Curso de Auxiliar de fisioterapia y rehabilitación: canina, felina y equina ayudarás a que estos seres vuelvan a la normalidad. 

 

¿Cuándo necesita rehabilitación un gato?

Cualquier dolor o molestia que sufra el gato es motivo suficiente para acudir a un/a médico/a veterinario/a. Si tras la consulta y diagnóstico, el tratamiento es la rehabilitación, es probable que se deba a un problema de columna, el sistema músculo-esquelético en general y/o tratamiento de enfermedades degenerativas. Haremos un repaso sobre todas ellas. 

Columna vertebral 

La columna vertebral es el eje del movimiento del gato y cualquier alteración, enfermedad o problema puede interferir en su movimiento y reducir su calidad de vida. Estas son algunas de las afecciones que pueden sufrir: 

  • Hernia discal. En el momento en el que el disco invertebral se desplaza y comprime la médula ósea, se produce una hernia discal que puede ser dolorosa para los felinos. Aunque la inmensa mayoría de estas lesiones son asintomáticas, cuando son molestas, la rehabilitación es la respuesta. Puede llegar a puntos graves en los que sea imprescindible la cirugía y, en ese escenario, la preparación y postoperatorio con fisioterapia pueden ser la clave.  
  • Fractura. Los traumatismos, golpes fuertes o accidentes pueden ser la causa de una fractura vertebral que requiera de técnicas de rehabilitación, también en el caso de que sea imprescindible la intervención quirúrgica. 
  • Infección. Los traumatismos de una infección en la columna vertebral pueden afectar gravemente a la movilidad del gato. Para ayudarle a recuperarse, además de aplicar los tratamientos pertinentes, la rehabilitación es la respuesta para ayudarle a reducir el dolor, la inflamación y recuperarse.  
  • Tumor. Un tumor en la columna que afecte a la médula espinal puede tener consecuencias neurológicas y de reflejos. La rehabilitación puede ayudar a los gatos a recuperarse.

Músculo-esquelético

El sistema músculo-esquelético está interconectado y cualquier alteración puede suponer un problema para el felino. La rehabilitación para gatos permite que el animal recupere su movilidad a través de técnicas y prácticas que veremos más adelante. 

Las enfermedades degenerativas que pueden afectar la movilidad de los felinos, como la artrosis o artritis, también son objeto de la rehabilitación para gatos. 

Las extremidades y las articulaciones forman parte de la anatomía del gato que puede ser susceptible de ser tratada con la rehabilitación si presenta problemas y enfermedades degenerativas como la artrosis o artritis.

 

Las etapas en la rehabilitación para gatos 

La rehabilitación aplicada en gatos tiene una serie de pasos que abarcan desde el tratamiento inmediato de la dolencia a la recuperación como para que vuelva a hacer vida normal. Descubre las etapas de esta disciplina. 

Tratamiento del dolor

Los primeros ejercicios de rehabilitación son analgésicos en la zona dolorida para que el gato cese de sufrir. También se aplican terapias como la magnoterapia o ultrasonidos a modo analgésico para calmar el área. 

El dolor del animal se trata con magnoterapia, ultrasonidos o electroterapia para reducir significativamente el dolor.  

Puede que con la rehabilitación sea suficiente, pero hay escenarios en los que es imprescindible el uso de fármacos para calmar el dolor del animal y es más que habitual combinar ambos tratamientos en esta fase. 

Atención a los tejidos blandos

Cuando ha cesado el dolor punzante de la primera etapa y tras los tratamientos pasivos, el felino puede recibir técnicas de rehabilitación para mejorar el estado de los tejidos blandos. 

Masajes y el uso de fuentes de frío y calor para aliviar el dolor en los tejidos blandos y preparar la zona para su trabajo forman parte de esta etapa. 

En este sentido, los masajes y el equilibrio entre frío y calor son dos grandes aliados en esta fase que busca impulsar la movilidad del gato. Las técnicas las puedes llevar a cabo en casa, siempre bajo la instrucción del/a terapeuta. 

Incremento masa y fuerza 

El traumatismo y/o dolor participa en que el gato se mueva menos y con muchas molestias. Por eso, una vez recupera la zona y se reduce el foco de su sufrimiento, puede empezar a caminar con soltura. 

En esta etapa se busca aumentar su fuerza y masa para que recupere energías, evitando la atrofia que pudo sufrir tras el periodo de inactividad. Puede realizarse de la siguiente forma: 

  • Primera fase. Realización de ejercicios leves pero que le permitan retomar la actividad ayudará a retomar la actividad en la primera fase. La hidroterapia y nadar son grandes aliados en esta etapa. 
  • Segunda fase. Ejercicios más exigentes partiendo con la hidroterapia y forzando al animal a dar paseos para equilibrar las cuatro patas por igual harán que vuelva a la normalidad. 

Vuelta a la normalidad

Cuando el dolor ha cesado y cuando el gato se desenvuelve con normalidad, es momento de introducir una serie de rutinas que reafirmen sus progresos y devuelvan sus habilidades a la normalidad. 

Los circuitos con obstáculos y carriles son el reto ideal para poner el broche final a la rehabilitación para gatos, especialmente para incentivarlos a entrenar la agilidad, coordinación y equilibrio que tenían antes de su traumatismo.

 

¡Devuélvele la calidad de vida a los gatos como terapeuta! 

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Auxiliar Fisioterapia y Rehabilitación Animal