Isabelita del Japón: ¿cómo es esta ave exótica?

La isabelita del Japón, capuchino del Japón o manón es una de las aves exóticas más populares como mascotas. En este artículo vamos a repasar todas sus características, así como los cuidados que necesitas tener en cuenta si planeas adoptar uno de estos animales como mascota. Y es que, si te interesa tener aves exóticas es necesario que conozcas sus cuidados específicos.

Por otra parte, además, conocer todo sobre este tipo de animales también te puede ayudar a encontrar un trabajo apasionante como experto en aves exóticas. Y es que, la formación en el ámbito veterinario, en concreto en Orrnitología: especialista en aves exóticas, puede darte el impulso que necesitas para mejorar tu futuro profesional.

Esto es un tema que también trataremos a lo largo de este texto, pero, de momento, vamos a empezar por ver cuáles son las principales características de la isabelita del japón. Un repaso por su aspecto físico, su personalidad, comportamiento y alimentación. ¡Empezamos!

Isabelita del Japón: Principales características de esta ave exótica

La isabelita del Japón es un ave exótica que no existe en estado salvaje. Se trata de una subespecie que se originó mediante el cruce selectivo del capuchi culiblanco con otras especies de aves de la misma familia. Así las cosas, su existencia se debe al trabajo de cría y selección por parte del hombre. Su origen, las especies de las que parte, son originarias del continente asiático y del trabajo de avicultores japoneses. Así, nos encontramos con que su nombre vulgar en castellano parece una deformación del nombre francés: moineau du Japon (gorrión del Japón).

Lo primero que hay que destacar sobre la isabelita del Japón es que se trata de un pájaro muy sociable. De hecho, acepta la convivencia con otras aves, de otras especies, algo que no suele ser muy frecuente en este tipo de pájaros. Otro punto importante dentro de las características fundamentales de estas aves es su tamaño, que no supera los once centímetros de longitud. Se trata, por tanto, de un ave de pequeño tamaño.

Los machos de esta especie se mueven más y son más ruidosos que las hembras, además emiten canto, cosa que las hembras no. Es una de las maneras de distinguir entre ambos sexos, aunque no es demasiado precisa.

Por otra parte, el color de las plumas de este pájaro puede ir desde el negro al blanco y presentar todas las tonalidades que están dentro de la gama del marrón. Así, nos podemos encontrar con ejemplares monocromos, a dos colores o multicolor. No obstante, la mayoría de las isabelitas del Japón son bicromas y tienen el plumaje liso, aunque algunos avicultores han logrado ejemplares con plumas rizadas.

Por último, otra de las características más relevantes de la isabelita del Japón hace referencia a la no presencia de dimorfismo sexual. Esto quiere decir que tanto las hembras como los machos de esta especie tienen el mismo tamaño, lo que dificulta su identificación. Así, los criadores tienen que fijarse en características secundarias para intentar determinar el sexo de estas aves.

¿Qué cuidados necesita una isabelita del Japón?

Lo más relevante a la hora de cuidar a cualquier tipo de animal es conseguir un hábitat adecuado para ellos y controlar la alimentación. La isabelita del Japón no requiere unos grandes cuidados y son aves con un bajo coste de mantenimiento. Además, también son pájaros que son sencillos de criar.

Ahora, vamos a centrarnos en ambos aspectos, hábitat y alimentación, respecto a la isabelita del Japón.

Alimentación

La alimentación de la isabelita del Japón no es difícil, ya que se trata de un animal bastante agradecido y que no le suele hacer ascos a nada. No obstante, hay que tener en cuenta que el pico de estos animales es cónico, lo cual quiere decir que se trata de un granívoro.

Es decir, la isabelita del Japón se alimenta fundamentalmente de semillas. Así, cada pájaro puede ser diferente y tener sus propias preferencias. De esta manera, lo más aconsejable es ir probando distintas mezclas para ver cuál es la que mejor se adapta a las necesidades de tu ejemplar.

Aparte del semillas y granos, también puede comer otro tipo de alimentos para complementar su dieta. Así, por ejemplo, las hierbas o las verduras son fácilmente aceptados por la isabelita del Japón. También se puede complementar su dieta con proteínas animales provenientes de distintos tipos de gusanos y larvas.

Hábitat

Como decíamos, la isabelita del Japón no existe en estado salvaje. Esto no quiere decir que no haya que adecuar su espacio a sus necesidades. A la hora de crearles un sitio cómodo, son pájaros que aceptan todo tipo de materiales para hacer su nido. Esto es importante, sobre todo, si tu objetivo es que críen. Para construir su nido es mejor darles una caja que sea fácil de limpiar.

Al tratarse de una especie que vive en cautividad, la recomendación por parte de veterinarios y avicultores es que se acomoden en jaulas que sean más largas que altas, como las que se usan en la cría del canario. El tamaño ideal oscila entre los 45 y los 50 cm de largo por unos 30cm de alto.

¡Fórmate como especialista en aves exóticas!

Ahora sabes todo lo fundamental sobre la isabelita del Japón, un ave muy popular y que, si quieres trabajar como experto en aves exóticas, debes conocer bien. Así las cosas, como comentábamos al principio, es imprescindible formarse adecuadamente.

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