Síndrome vestibular en perros: ¿qué es, cómo se diagnostica y qué tratamientos tiene?

¿Tu compañero canino parece mareado? ¿Hace movimientos extraños con los ojos o ha comenzado a vomitar? Ante cualquiera de estos signos, debes acudir rápidamente a tu clínica de confianza. Y es que puede tratarse del síndrome vestibular que los perros sufren tanto en la juventud como en la vejez, a raíz de causas tanto leves como graves.

Con el Curso de Asistente/a y Auxiliar Técnico/a Veterinario/a de Nubika, estarás preparado/a para identificar con claridad estas primeras manifestaciones físicas y contribuir a que el tratamiento del animal logre su recuperación. Porque sí, la cura es posible, sobre todo si los cuidados empiezan a tiempo. ¡Conoce más sobre esta enfermedad y el modo de revertirla!

¿Qué es el síndrome vestibular?

El síndrome vestibular de los perros es una dolencia asociada, o bien al sistema auditivo, o bien al sistema nervioso central. En función de dónde se origine el problema, estaremos hablando de una patología de escasa importancia o, por el contrario, de una enfermedad neurológica que puede precisar de cirugía.

El motivo de que existan tantos posibles desencadenantes se debe a que el aparato afectado es, como su nombre indica, el vestibular. Este está formado por el oído interno, el nervio vestibular y el cerebro, que trabajan juntos para ayudar al perro a entender cuál es la posición de su cuerpo en función del espacio que le rodea.

El sistema vestibular es el encargado de que el perro mantenga el equilibrio y se mueva de manera coordinada

Es decir, resulta básico para que el animal realice movimientos coordinados y mantenga el equilibrio. Suele empezar a fallar en la vejez, por lo que, si tienes dudas, puedes revisar cómo se calcula la edad de los perros y comprobar si el tuyo se encuentra en esta etapa.

Si no es así, no te confíes, porque también puede producirse en ejemplares jóvenes, a raíz, por ejemplo, de una lesión o de un medicamento con efectos en el sistema vestibular. En los perros, este síndrome es de lo más diverso. Así que aprendamos, antes de nada, cómo se expresa físicamente.

Signos y síntomas en perros

Los síntomas del síndrome vestibular en los perros son muy preocupantes para quienes conviven con ellos. La mayoría de los indicadores de que existe una afección de este tipo están relacionadas con la falta de equilibrio, pudiéndose producir las siguientes manifestaciones:

• Ladeamiento de la cabeza.
• Movimiento rítmico de los ojos.
• Vómitos o inapetencia.
• Descoordinación
• Caídas o dificultad para caminar en línea recta.

Todos los perros pueden sufrir esta clase de problemas, pero es más común que se den estos síntomas en algunas de las razas de perros que hay. ¿En cuántas? Según los estudios, en cuatro: el beagle, el dálmata, el cocker spaniel y el basset hound presentan una mayor incidencia de afecciones en el oído interno y, por lo tanto, una mayor predisposición a sufrir el síndrome vestibular de los perros.

Diagnóstico: claves para identificar el síndrome

Aunque los síntomas comiencen siendo leves, el cuadro puede empeorar con el paso de los días. Por eso, es fundamental acudir a un centro veterinario que identifique las causas del síndrome y paute un tratamiento.

Lo primero que hará el/la especialista será revisar el equilibrio del animal y chequear sus oídos para descartar lesiones o infecciones. Si no se aprecian alteraciones en la zona, lo común es pedir pruebas generales como analíticas o radiografías, con el fin de localizar el área afectada.

En el caso de que se sospeche de que el síndrome vestibular del perro se debe a un fallo en el sistema nervioso, se procederá a realizar resonancias y tomografías que den una imagen más clara sobre el cerebro y sus conexiones.

Causas comunes del síndrome vestibular en perros

¿Por qué se produce el síndrome vestibular en los perros? La otitis suele ser la causa más frecuente, así como la inflamación o el daño en los nervios que lo enlazan con el sistema nervioso central.

En estos casos, hablamos de un síndrome vestibular periférico, que se considera leve y tiene cura. Otro cuadro que no presenta gravedad es el idiopático, que carece de una causa neurológica o de otro tipo y que suele revertirse por sí solo.

Sin embargo, también cabe la posibilidad de que el diagnóstico sea desfavorable y se trate del síndrome vestibular central. Este sí que tiene causas neurológicas y puede deberse a afecciones como:

• Tumores: el tumor cereberal en el síndrome vestibular del perro supone una lesión destructiva en el cráneo.
• Toxoplasmosis
• Moquillo

Tratamientos para el síndrome vestibular en perros

El tratamiento que se paute dependerá totalmente de la causa del problema. Si es una patología idiopática, el/la facultativo/a recetará medicamentos contra las náuseas o sueros por la falta de apetito.

Si se debe a una infección bacteriana, los antibióticos deberían solucionar el problema. En los casos más graves, en ocasiones hay que extirpar los tumores mediante cirugías o pautar medicinas que el animal tendrá que consumir para siempre.

Prevención: medidas para evitar problemas de equilibrio

¿Es posible evitar el síndrome vestibular en perros? Lo cierto es que no hay remedios infalibles, pero sí algunas actuaciones que ayudarán a que tu amigo se mantenga lo más sano y protegido posible. ¡Vamos a verlas!

• Ejercicio regular: juega con tu compañero o proponle ejercicios de adiestramiento canino para que lleve una vida activa.
• Alimentación equilibrada: asegúrate de que la nutrición de tu perro contiene todos los elementos que necesita su organismo para funcionar correctamente.
• Control ambiental: presta atención a las sustancias a las que el can puede tener acceso y retira las potencialmente dañinas. Por ejemplo, los productos de limpieza o las plantas que resultan tóxicas para la especie.

¡Fórmate y contribuye a la salud animal!

Ahora que ya sabes qué es el síndrome vestibular en los perros, estás mucho más preparado/a para identificarlo. Y lo estarás aún más si te formas en cuidados clínicos animales con nuestro Curso de Asistente y Auxiliar Técnico/a Veterinario/a.

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Bibliografía

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• Carpinetti, R.A. (2017). Plantas toxicas de interés veterinario en el perro. Disponible en: https://repodigital.unrc.edu.ar/xmlui/handle/123456789/76778 [Accedido el 29/11/2023].

Nota: El artículo no es clínico y los contenidos pueden no corresponder con una situación de salud veterinaria específica al no ser redactados por especialistas. Recomendamos acudir al médico veterinario para el tratamiento o consejo de cualquier problema de salud de tu mascota.