La terapia ocupacional con animales se ha extendido por hospitales, centros educativos y clínicas privadas de todo el mundo. Los/as pacientes extraen poderosos beneficios de su relación con la fauna, que ayuda al/la terapeuta a lograr los objetivos de las sesiones.

No basta, claro está, con incluir en la consulta a un gato o a un perro, sino que hay que comprender las patologías de los/as usuarios/as y la conducta animal. Un modo ágil de obtener estos conocimientos es formarse con un curso de terapia asistida con animales, que te enseñe a poner en práctica todos los conceptos que explicaremos a continuación. ¡Echa un vistazo!

¿Qué es la terapia ocupacional con animales y cómo funciona?

La terapia ocupacional con animales es el conjunto de actuaciones que mejoran el estado físico, mental o social del/la paciente con la ayuda de los animales de compañía. Las principales especies que se emplean son los perros, los gatos y los caballos, aunque también hay otras alternativas que se pueden probar, como la terapia con aves.

Se trata de aprovechar la relación que surge entre el/la usuario/a y el ser vivo para disminuir sus limitaciones físicas, potenciar la regulación de los sentimientos y, en definitiva, convertirlo en un miembro más independiente e integrado en la sociedad. Los procesos terapéuticos per se pueden alcanzar estas metas, pero la terapia ocupacional con animales agiliza el avance, especialmente en los casos en los que la conexión con el/la paciente se complica, como en el autismo.

El funcionamiento de este método depende de los objetivos que la terapia asistida con animales persiga en cada sesión. Si se trata de sanar traumas emocionales, por ejemplo, la simple presencia de un amigo de cuatro patas ya calma al/la usuario/a y favorece que se abra al/la especialista. En otros procesos, se organizan actividades en las que participa el animal para obtener distintos resultados:

  • Darle de comer o pasearlo, para mejorar el sistema motor o la coordinación de movimientos en personas con dificultades físicas.
  • Cepillar o montar a un caballo: la equinoterapia es habitual en niños/as con autismo, ya que aumenta su capacidad para seguir instrucciones, así como su relación con el entorno.
  • Incorporarlo como animal de compañía del/la afectado/a: para que la responsabilidad de cuidarlo le impulse a retomar actividades abandonadas a causa de la depresión o de otros trastornos.
  • Introducirlos en recintos médicos: con el fin de tranquilizar a los/as pacientes y ayudarlos/as a enfrentar tratamientos complicados.

Tipos de terapia asistida con animales

Ya hemos dicho que los domésticos son los animales más típicos de la terapia ocupacional. Sin embargo, existen muchas modalidades de terapia que recurren a otra clase de especies y es en eso en lo que se basan los diferentes tipos de intervención asistida con animales.

Lo importante es que el ejemplar escogido sea amistoso, sociable y capaz de permanecer calmado. En la mayoría de los casos, también es positivo que tenga una buena capacidad de interacción, para que surja un vínculo más fuerte con el sujeto.

Si tienes curiosidad por descubrir los tipos de animales que se usan en cada modalidad de terapia ocupacional, hoy es tu día de suerte: ¡hacemos un repaso por los principales tipos de terapia asistida con animales!

Caninoterapia

En la caninoterapia se usa la intervención asistida con perros que están entrenados específicamente para el apoyo a personas con necesidades específicas. Se trata de un tipo de terapia asistida con animales que mejora el estado de ánimo, reduce la ansiedad y fomenta la interacción social de los pacientes. 

La caninoterapia se suele emplear en el tratamiento e intervenciones con personas con discapacidades físicas, trastornos del espectro autista, ansiedad, depresión y trastorno de estrés postraumático (TEPT).

Gatoterapia

Se emplea la interacción con gatos para generar beneficios terapéuticos en los pacientes, especialmente en aquellos que requieren intervención para manejo del estrés y la ansiedad. El trabajo con este tipo de animales proporciona calma y reduce la presión arterial al mismo tiempo que fomenta la empatía y el afecto, entre otros beneficios.

De esta manera, la gatoterapia se suele emplear sobre todo para intervenciones asistidas con animales en tratamientos por ansiedad, pero también en personas mayores, niños con problemas emocionales o personas que experimentan estrés y soledad.

Ornitoterapia

En la ornitoterapia se realizan intervenciones asistidas con aves centradas en el cuidado de este tipo de animales. Se estima que este tipo de terapia asistida tiene efectos sobre la estimulación de la calma y ayuda a centrar y enfocar a las personas en un objetivo concreto. 

Equinoterapia

La equinoterapia se desarrolla alrededor de actividades que están relacionadas tanto con la monta como el cuidado de caballos. En este caso, los diferentes estudios demuestran que esto puede ayudar a mejorar habilidades físicas y emocionales. 

Delfinoterapia

En entornos acuáticos y con animales específicamente entrenados para ello, la terapia asistida con delfines no cuenta con la suficiente evidencia científica que la sustente aunque sí se han llegado a observar algunos beneficios de su aplicación. 

Otro de los problemas que plantea este tipo de intervención asistida con animales tiene componentes éticos sobre el bienestar de los animales, ya que se trata de una especie salvaje no domesticada, como sí ocurre en otros tipos de terapias con animales.

Terapia asistida con animales de granja

Asimismo, muchas veces se recurre a animales de granja para aliviar el sufrimiento anímico y ofrecer experiencias basadas en la conexión con la naturaleza. El contacto con vacas, ovejas y cerdos son buenas soluciones para el estrés e invitan a relacionarse con el resto de los/as participantes.

Beneficios de la terapia ocupacional con animales

La terapia ocupacional con animales reduce la agitación de los/as usuarios/as, sus crisis emocionales y hasta su posible agresividad. La versatilidad en una de sus grandes ventajas, ya que pueden emplearse distintas especies y diseñar tratamientos personalizados que las involucren en función del/la sujeto.

Pero no hace falta tener una patología grave para disfrutarlos. Los ancianos, por ejemplo, mejoran mucho su calidad de vida al participar en estos programas. ¡Veamos los beneficios de la terapia asistida con animales!

  • Incrementa la motivación: el/la usuario/a se siente más predispuesto/a a realizar la terapia, porque la presencia del animal actúa como un estímulo. Eso aumenta su implicación y permite que empiece a mejorar antes.
  • Crea el ambiente propicio: la terapia ocupacional con animales calma a las personas y las anima a enfrentarse a situaciones que les suponen un reto. Además, facilitan la comunicación usuario/a-profesional.
  • Se adapta a diversos perfiles: un animal es terapéutico ante un gran número de casos, como la depresión, las discapacidades físicas, la diversidad funcional o los problemas asociados a nuestros/as mayores.
  • Trabaja la musculatura y el sistema nervioso: interactuar con otro ser vivo implica realizar movimientos que refuerzan los músculos y la coordinación.
  • Potencia las habilidades sociales: conectar con un animal que no te juzga es más fácil que hacerlo con una persona y sirve, entre otras cosas, para aprender a gestionar las emociones. Es decir, que actúa como una especie de “entrenamiento” para la integración con otros seres humanos.

Desafíos y consideraciones en la terapia ocupacional con animales

La terapia ocupacional asistida con animales (TAAA) presenta un enfoque prometedor para mejorar el bienestar físico, emocional y social de diversas poblaciones. Sin embargo, su implementación enfrenta varios desafíos y consideraciones que deben abordarse para garantizar la eficacia, seguridad y ética de las intervenciones.

Estos desafíos incluyen desde aspectos relacionados con el cuidado y entrenamiento de los animales hasta factores regulatorios y de accesibilidad económica. Vamos a ver algunos de ellos más en profundidad:

  • Es necesario garantizar que los animales estén bien entrenados y en condiciones óptimas para interactuar con los pacientes sin experimentar estrés es fundamental.
  • La falta de normativas uniformes dificulta la estandarización y supervisión de las prácticas, lo que podría poner en riesgo tanto a los animales como a los pacientes.
  • La presencia de animales puede implicar riesgos como alergias, infecciones zoonóticas y problemas de higiene en entornos terapéuticos.
  • Diseñar actividades que sean efectivas y seguras para personas con diferentes necesidades y condiciones puede ser un reto significativo.
  • El entrenamiento, cuidado de los animales y la formación especializada de terapeutas pueden incrementar los costes, dificultando el acceso a esta terapia para algunas comunidades.
  • Aunque existen estudios sobre los beneficios de la TAAA, se necesita más investigación para demostrar su eficacia y justificar su inclusión en sistemas de salud formales.

¿Cuál es el futuro de la terapia ocupacional con animales?

El futuro de la terapia ocupacional con animales parece prometedor porque combina lo mejor de dos mundos: el cuidado de la salud y la conexión emocional que solo los animales pueden ofrecer. Cada vez hay más interés en integrar estas terapias en hospitales, escuelas y comunidades, ya que cada vez hay más evidencia científica de sus beneficios.

Por otro lado, se está trabajando para que estas terapias sean más accesibles y éticas, pero para ello se necesitan mejores regulaciones y más profesionales capacitados. Con el paso del tiempo y la evolución la intervención asistida con animales puede ser una buena opción para el tratamiento complementario de diversos problemas. 

¿Qué estudiar para convertirse en terapeuta ocupacional con animales?

Para trabajar en terapia asistida con animales es necesario disponer de una formación especializada. Ten en cuenta que te implicarás en los tratamientos de personas con diversas dolencias, y que deberás comprender estas patologías para guiar al animal del mejor modo posible.

Para ello, existen diversas formaciones complementarias, cursos especializados en intervención asistida con animales para titulados en terapia ocupacional que te pueden ayudar a encontrar tu hueco en este apasionante mundo.

También es importante conocer los protocolos de actuación para proteger al animal y evitar que se estrese durante las sesiones. Como señalamos al comienzo del artículo, la formación técnica es un buen modo de conseguir el perfil profesional adecuado para este oficio. ¡Asegúrate de que el programa abarca los tipos de terapia principales y empieza a construir tu trayectoria!

¡Convierte el amor en terapia!

No sabemos si el amor es, como dicen, la mejor medicina, pero ¡sí que es el mejor complemento! Sobre todo, si procede de animales que no censuran ni exigen y que son generosos con su cariño.

Si quieres transformarlos en un catalizador de los avances físicos, psíquicos y sociales de las personas, en Nubika podemos ayudarte. Con nuestro Curso de Terapia Asistida con Animales, aprenderás los principios básicos para contribuir a la mejora del bienestar de quienes más lo necesitan. ¡Infórmate y dales un giro animal a las sesiones terapéuticas!

Bibliografía